Blog donde compartiré temas relacionados con la Auditoria Interna, control interno, mejoramiento de procesos, mejores prácticas referente a la profesión. Contribuir con información valiosa es uno de los objetivos del blog, ya que considero que el conocimiento, la lectura constante y la autopreparación conllevan al crecimiento profesional. "El conocimiento siempre debe multiplicarse"
jueves, 28 de agosto de 2014
miércoles, 20 de agosto de 2014
martes, 12 de agosto de 2014
Adiós a la regla de Pareto
Si algo aprendimos durante nuestro paso por la universidad o en la experiencia profesional, es la famosa regla de Pareto, o la regla del 80/20. Para todos es claro que en la mayoría de los mercados y compañías el 20 por ciento de los productos hacen cerca del 80 por ciento de las ventas. Pues esto que aprendimos ya no es necesariamente cierto.
Es momento para desaprender la regla de Pareto y explorar lo que comienza a pasar en los mercados, con el desarrollo de la tecnología informática y el internet.
Históricamente muchos de los mercados han estado dominados por las ventas de unos pocos productos en grandes volúmenes. Ejemplos como la industria editorial, la cinematográfica o la de la música, han mostrado en el pasado concentraciones en ventas en algunos “blockbusters”, “best sellers” o “hits”.
Sin embargo, esta concentración está cambiando en varias industrias. Chris Anderson, acuño el término “long tail” o “cola larga”, para definir el fenómeno en el cual los productos o servicios de nicho, sumados, pueden alcanzar una participación importante de las ventas.
Los profesores de MIT Erik Brynjolfsson y Duncan Simester, junto con Yu Hu de Purdue, estudiaron este fenómeno con datos reales, para concluir que el desarrollo del internet hace posible que la regla de Pareto no sea aplicable y esté siendo remplazada por el concepto de “cola larga” o “long tail”.
La evidencia muestra que en varias industrias, el desarrollo del comercio electrónico y del internet, ha permitido una mayor variedad de productos y por lo tanto una desviación de la regla de Pareto. Por ejemplo, en la industria editorial, en los DVDs y en la música, los datos muestran que un mayor porcentaje de los ingresos proviene de una mayor variedad en la oferta. Hay dos razones para explicar este fenómeno:
La primera se enfoca en la oferta. El argumento se basa en que el internet y el desarrollo digital facilitan a las empresas aumentar la variedad de los productos y servicios disponibles para la venta sin necesidad de incurrir en costos o inversiones en capital de trabajo excesivas. Es hoy mucho más fácil para las compañías tener un mayor número de referencias en comparación con lo que podría ser económicamente viable en los canales de comercio tradicionales. Un ejemplo claro de esto es la diversidad de títulos ofrecidos en Amazon en comparación con una librería tradicional.
La segunda explicación se centra en el lado de la demanda. El internet permite a los consumidores incrementar la información de la oferta disponible en el mercado, en forma fácil y sin incurrir en mayores costos. Lo anterior incrementa la demanda de productos de nicho. Ejemplos de esta explicación son las tiendas online que con su facilidad de búsqueda y comparación permiten que los usuarios encuentren productos de nicho que ni siquiera se atreverían a buscar en el mundo offline. Las dos explicaciones parecerían ser viables y estar presentes en forma combinada.
Brynjolfsson, Simester y Hu, estudiaron el caso de una compañía mediana de ventas de ropa para mujeres con ventas por internet y ventas por catálogo. Lo interesante para este estudio es que los precios y el portafolio de productos de la compañía estudiada son exactamente los mismos en el mundo físico y en el virtual.
El estudio confirma que las ventas en el canal de internet tienen una distribución menos concentrada en productos, que las del canal de venta directa. Este resultado es consistente con la teoría del “long tail”. Como ambos canales ofrecen el mismo portafolio, es obvio que esta diferencia no se debe a las condiciones de variedad en la oferta. El uso de las herramientas de búsqueda y recomendación está asociado a un aumento significativo en la venta de productos de nicho.
Conclusión
Durante toda nuestra vida hemos aprendido que la mayoría de los mercados están dominados por la venta de unos pocos productos. Sin embargo, el mundo ha cambiado. Ahora la regla de Pareto no aplica. Los productos de nicho y el principio de “long tail” se están tomando el mundo. La primera explicación lógica es que la comercialización online facilita la disponibilidad de referencias. Esto sin duda alguna, es una realidad.
Sin embargo, los bajos costos de búsqueda parecen tener gran impacto, aunque no exclusivo, en el aumento de participación en las ventas de los productos de nicho. Esto tiene grandes implicaciones. No solo porque la regla más conocida en el mundo de los negocios dejó de ser válida, sino porque, esto significa que las estrategias de las compañías deberán basarse todos los días más, en herramientas y tecnologías de información más sofisticadas que permitan a los consumidores descubrir productos que nunca encontrarían en el mundo offline.
Tomado de: http://www.pitchbull.com/wisdomcave/adios-a-la-regla-de-pareto/
Invertir en computadoras no es invertir en TI
Alonso Ulloa Vélez | alonso.ulloa@kineos.mx | Drector General de Kineos
Si queremos que nuestra inversión en TI dé resultados, recordemos que comprar equipo es sólo el primer paso. El software adecuado y los servicios que agregan valor son la clave.
Sin duda, invertir en TI (tecnologías de la información) es una buena apuesta. No es sólo un cliché, un buen deseo o una observación intencionada de alguien a quien le gustan los temas de tecnología. Hoy es imposible concebir una empresa que no cuente con correo electrónico, que no trabaje sus documentos utilizando un procesador de palabras o que prefiera hacer sus cuentas a mano que en una hoja de cálculo. La computadora se ha convertido en un elemento indispensable en las oficinas, y muchos de quienes abren un negocio, o de quienes amplían el que tienen, ponen en su lista de compras, junto con el escritorio, la silla y el bote de basura, una computadora.
Estas inversiones en equipo de cómputo se hacen pensando en construir un futuro mejor y generar un mayor rendimiento del negocio, y es razonable pensarlo así. De acuerdo con un estudio publicado por el Banco Mundial, las empresas que usan las TI en sus procesos de negocio incrementan en ventas y en rentabilidad al menos un 5 por ciento por encima de aquéllas que no lo hacen. Sin embargo, en los países con economías emergentes —México, entre ellos— hemos malentendido el concepto. Por muchos años hemos creído que comprar computadoras es invertir en TI, y desafortunadamente no es así.
Las tecnologías de la información se componen, principalmente, por tres elementos: el primero es, ciertamente, el equipo de cómputo o hardware (computadoras, impresoras y demás elementos físicos). El segundo son los programas para estos equipos; es decir, el software. El tercero son los servicios profesionales asociados a la tecnología.
Evidentemente, de nada sirven las computadoras sin los programas que las hagan funcionar. Sin embargo, el procesador de palabras y la hoja de cálculo no son suficientes para transformar la operación de las empresas. Es necesario contar consoftware especializado y con los servicios de profesionales que nos ayuden a que esas computadoras realmente se conviertan en una ventaja competitiva para nuestros negocios.
Ejemplos hay muchos; vayamos con uno que es básico: para tener presencia en internet, por ejemplo, se requiere adquirir un dominio, desarrollar un sitio web y contar con el software indicado para poner a la venta tus productos o servicios en línea. Además, será necesario llevar a cabo una estrategia de promoción en medios digitales para que tus clientes potenciales te encuentren. Nada de esto se resuelve con la compra de una computadora, pues ni el desarrollo de los programas ni los servicios de promoción vienen incluidos de fábrica en el aparato.
El valor no está en los fierros, sino en cómo manejamos los datos
Otro aspecto malentendido es el del manejo de la información. Podemos llevar el registro de nuestros inventarios y de nuestras ventas, así como abrir un directorio con los datos de nuestros clientes y proveedores… pero hacer que dichos datos se conviertan en información que nos permita tomar decisiones para comprar mejor y vender más requiere echar mano de soluciones tecnológicas superiores a una hoja de cálculo. Los sistemas y procesos de inteligencia de negocios no vienen incluidos con la computadora, y lograr implantarlos en nuestra organización requiere de inversión y asesoría profesional.
Como se aprecia en el Gráfico 1, en las economías desarro-lladas, la inversión en hardware representa el 36 por ciento del monto total de la inversión en TI; el software representa el 23.3 por ciento, y los servicios el 40.7 por ciento. Por otro lado, en los países con economías emergentes —México incluido— no hemos entendido que el valor no está en los fierros, sino en elconocimiento y en el valor agregado que nos ofrecen el software y los servicios de TI. En nuestro país, concentramos el 62.6 por ciento de la inversión en hardware, pero sólo el 13.2 por ciento en software y el 24.2 por ciento en servicios.
Esto se convierte en algo particularmente alarmante cuando consideramos que México tiene una industria importante desoftware y de servicios de TI que, desafortunadamente, las empresas mexicanas no estamos aprovechando.
Por muchos años hemos creído que comprar computadoras es invertir en TI, y desafortunadamente no es así.
Recordemos que hemos entrado a la era ‘Post-PC’
En un mundo tan aceleradamente cambiante como el que estamos viviendo, tener una computadora sentada en el escritorio es cada vez más irrelevante. Si nuestros procesos de negocios no están considerando los dispositivos móviles que están hoy en las manos de nuestros colaboradores, clientes y proveedores, temo decir que estamos dejando pasar oportunidades para vender más y con más margen, comprar a mejores precios y administrar con menores costos. No olvidemos que el futuro, en términos de tecnología, cada vez llega más rápido.
Optimizar procesos, gestionar de forma más eficiente los recursos de la empresa, atender de mejor manera al mercado, contar con un mejor control logístico y hacer un mejor uso de la información y el conocimiento generado en la organización, son tan sólo algunos de los retos que pueden ser abordados con el uso de las TI. Hacerlo bien nos llevará a esa mejora competitiva que buscamos.
Es necesario, pues, cambiar el concepto. Cuando pienses en comprar una computadora, recuerda que ésta no es un fin, sino un medio. Recuerda que, para que esa inversión sea eficaz, deberás invertir al menos dos tantos más en software y en servicios.
Tomado de: http://www.mejorespracticas.com.mx/invertir-en-computadoras/
viernes, 1 de agosto de 2014
Auditoría Interna y Externa Frente al Fraude
Tomado del Blog de NAHUN FRETT
viernes, 1 de agosto de 2014
Por Guillermo Casal
La auditoría interna es una segunda barrera frente al fraude, posterior a la primera que ha sido establecida por la gerencia. Cuando la detección de indicadores de fraude es efectuada por los auditores internos, la organización como tal aún no ha fallado, pero la gerencia sí. A efectos de robustecer entonces el sistema de control interno, los auditores internos deberán ejercer un rol docente para explicar a la gerencia cuales son los factores que les han permitido detectar señales de irregularidades (o ineficiencias, pero no es el propósito de este libro). La gerencia quedará entonces facultada para atender estas situaciones en el futuro, pero a la vez comprometida con la dirección superior de la organización para evitar la recurrencia de nuevas situaciones sospechosas no detectadas
La auditoría interna, por su parte, debe apuntar a un enfoque preventivo. En tal sentido, el desarrollo de la informática ha permitido establecer el llamado sistema de “auditoría continua”, consistente en desarrollar consultas o queréis de auditoría que detectan transacciones sospechosas y disparan en consecuencia la ejecución anticipada de auditorías. Tales consultas son luego compartidas con la gerencia, quien puede tomar acción correctiva oportuna y permitir a la auditoría interna enfocarse en examinar la acción correctiva gerencial en lugar de emprender una y otra vez revisiones anticipadas por el surgimiento de indicadores de transacciones sospechosas.
La auditoría externa no forma parte de la estructura organizacional, y tampoco tiene por función la detección y remediación de ineficiencias e irregularidades. Por esta doble característica, la detección de posibles irregularidades por los auditores externos (la tercera barrera contra el fraude), resulta preocupante para la organización. Indica que un tercero externo a la organización ha detectado algo que no era motivo de su interés, y que la organización no ha podido hacerlo. De todas formas, es preferible que el posible fraude sea detectado por el auditor externo antes de que continúe desarrollándose sin que la organización tome conocimiento de él.
Guillermo Casal, CIA, CCSA, CFSA, CGAP, CRMA, CISA, CFE - Contador Público y Master en Economía y Administración de empresas en Argentina. Con más de 35 años actuando en todas las especialidades de Auditoría. Auditor interno, externo, informático y forense. Obtuvo todas las certificaciones del IIA (CIA, CCSA, CFSA, CGAP, CRMA). También la CFE (examinador de fraudes), y la CISA (auditor informático). Dedicado hace quince años a la consultoría y capacitación. Fue colaborador de Luis Moreno Ocampo, ex fiscal penal de la Corte internacional de la Haya, y Stephen Walker, ex agente especial del FBI. Para mayor información visite www.guillermocasal.com.
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